El realizador Steven Soderberg lleva más de una década amenazando con dejar el cine, quejándose de lo mal que está todo para, acto seguido, esputar otra de sus mediocridades. Porque hablamos de un mediocre que recuerda a esos tipos que un buen día se suben a una azotea y amenazan con arrojarse al vacío sólo para llamar la atención. Un plasta de manual, vamos.
2001 fue su gran año: de un lado, triunfó ante la crítica con Traffic, que era en realidad la versión cinematográfica de una serie de TV; y por otro, triunfó ante el público con Ocean´s Eleven. Otro remake, en esta ocasión de una película de 1960 protagonizada por esa entrañable pandilla de juerguistas y borrachuzos que era el Rat Pack. Y aunque el carisma de George Clooney o Brad Pitt no sea comparable al de Frank Sinatra o Sammy Davis Jr, hay que admitir que el resultado de la apuesta fue bastante digno. También en la parcela musical, que rinde tributo a la primera película y a su época incluyendo cortes de Percy Fates, Perry Como y otros artistas que actuaban por entonces en Las Vegas, aunque sin duda lo más conocido es este famoso remix de Elvis Presley:
En cuanto a la parte que podríamos llamar “actual” de la BSO, compuesta por David Holmes, si bien tiene altibajos se apoya igualmente en una percusión potente y pegadiza para encajar en sus escenas como un guante, aunque temas como Gritty Shaker o 69 Police, que cierra la película y da paso a los créditos finales, quizá resulten algo pesados para dedicarse simplemente a escucharlos sin imágenes de por medio.