El 26 de agosto de 1972 daban comienzo los Juegos Olímpicos de Munich. Las autoridades de la entonces Alemania Occidental se habían pasado seis años preparando el evento como forma de lavar ante el mundo el infausto recuerdo de los Juegos de Berlín de 1936 y el nazismo, proyectando la imagen de su país como lugar de pacifismo, concordia y modernidad. Esas buenas intenciones se fueron al garete cuando, en la madrugada del 5 de septiembre, un comando de la organización terrorista palestina Septiembre Negro entró subrepticiamente en la Villa Olímpica y secuestró a un numeroso grupo de atletas y entrenadores israelíes. Las 21 horas siguientes revelaron las deficiencias del operativo de seguridad y de unas autoridades que fueron cogidas a contrapié. No supieron reaccionar adecuadamente, y cuando lo hicieron fue para provocar una masacre que marcaría para siempre los Juegos.
Este telefilme de 1976 recrea el desarrollo de aquellos hechos y lo hace casi al pie de la letra, con un estilo marcadamente documental especialmente durante el primer acto. Famosa en su día por razones obvias relacionadas con su evidente oportunismo (aunque hubiesen transcurrido cuatro años desde los hechos), se nota que pese a ello había un interés claro por hacer las cosas bien y de este modo el resultado puede juzgarse así, bueno.
Transcurridas varias décadas, ver ahora esta película quizás valga la pena más que en su momento y su duración, que es la justa y necesaria, ayuda en ese sentido al tratar de centrarse en lo más importante de esas 21 horas. Pero resaltando, como no podía ser de otra forma, el lamentable intento de rescate en el aeropuerto, que se lleva un buen trozo del tercio final del metraje. A destacar la colaboración en el guión del novelista Howard Fast, autor de Espartaco, así como el reparto encabezado por William Holden como (no muy creíble) jefe de policía, Franco Nero como (tampoco muy creíble) jefe de los terroristas y Paul Smith, el malo malísimo de El Expreso de Medianoche, interpretando en un pequeño papel a uno de los rehenes judíos.