En 1983, el guionista de Alien Dan O´Bannon unió fuerzas con el debutante Don Jakoby para crear esta historia, en la que un brillante pero indisciplinado piloto de helicóptero de la policía de Los Ángeles es elegido para evaluar un revolucionario aparato al que apodan «El Trueno Azul», repleto de chismes con los que atajar la ola de criminalidad que amenaza la inminente celebración de los Juegos Olímpicos.
John Badham, un director que entonces atravesaba una envidiable racha de éxitos que había empezado en 1977 con Fiebre del Sábado Noche e incluiría posteriormente títulos como Juegos de Guerra o Cortocircuito, fue el encargado de llevar la batuta de este entretenido filme realizado al socaire de la moda impulsada por teleseries como El coche fantástico, en las que vehículos de alta tecnología se asocian con sus pilotos humanos para convertirse en una especie de superhéroes biomecánicos. Blue Thunder puso otra muesca en el revolver de éxitos de Badham, volviendo a colocar en el mapa a Malcolm Mc Dowell y sobre todo a Roy Scheider por obra y gracia de un personaje carismático y unos diálogos duros y chispeantes. Última película del también actor Warren Oates, que falleció poco después de acabar el rodaje y al que va dedicada.